Hace unos años que el color rojo comenzó a formar parte de las cocinas, un color vivo que a simple vista puede parecer demasiado chillón y sin embargo puede crear un ambiente muy chic y de energía vibrante.

Normalmente, este color se suele mantener en cocinas de diseño moderno y combinadas con otros tonos, como ésta que montamos, que tiene el mobiliario en rojo, la encimera negra y las paredes con un revestimiento blanco.

Estos tres colores se complementan muy bien juntos: El rojo da modernidad, el negro aporta elegancia y el blanco añade luminosidad.

Los electrodomésticos en acero inoxidable y los tiradores en asa cromados conectan muy bien con el trimonio rojo, negro y blanco.